jueves, 13 de noviembre de 2014

CORRUPTO SOY, MAS CORRUPTO ENAMORADO
Aunque creo  haber encontrado mi lugar en el mundo en la frontera entre La Safor y la Marina Alta, a orillas del mar y cerca de les Valls  de Pop, la Gallinera, Ebo y Laguar, soy de Teruel porque en Teruel  nací y allí comí, jugué y pequé por primera vez, durante esa patria que espero se siga diciendo que es la infancia. Y precisamente  andaba yo sacando pecho en estos pagos de tanto "porque me da la gana" , tanto Gurtel y tanto imputado, de que era  Aragón la comunidad española con menor número casos de corrupción abiertos en los juzgados, cuando me estalló en pleno presumir la dimisión Carlos Enrique Muñoz Obón, diputado turolense por el Partido Popular después de saberse que, cual Monago, pagaba sus viajes a Canarias con cargo al erario público.

La diferencia, nada desdeñable, es que a mi paisano le faltó tiempo para dimitir. Muy pronto supimos también que corrupto podía ser, pero era Muñoz un corrupto enamorado, que iba tanto al archipiélago para encontrase con su amada, la colombiana canaria Olga María Henao, que, oh sorpresa!, era precisamente la misma colombiana canaria por la que José Antonio Monago había realizado treinta viajes insulares con cargo a esa institución tan Útil para todos los españoles que es el Senado. Pero el presidente extremeño,  no como el diputado turolense, a fecha de hoy sigue mareando la perdiz, proclamando  una excusa de mal pagador tras otra, y de dimitir ni palabra. Apenas ha pedido que le echen cuentas "a ver lo que se debe". Dicen que la distancia es el olvido, pero  durante dos años y medio - a cargo del Senado- el fustigador de nacionalismos periféricos señor Monago no concibió esa razón.

Desde un lado menos vistoso,aunque con la misma vertiente de irregularidad delictiva,  la historia del señor Muñoz y su trascendencia nacional suma enteros no solo a la insistencia de Teruel en existir, sino también a su voluntad de convertirse en la ciudad de los amantes y del amor, donde hasta lo de corromperse se hace por tan noble motivo. Solo por amor, y nada mas que amor, se entiende que el ex diputado Muñoz llevase a la bella militante canario colombiana, como pareja oficial, of course, a la toma de posesión de Felipe VI como rey de España, en sustitución de su muy casquivano y enamoradizo padre Juan Carlos I de las Corinas y los Pobres Elefantes. Teruel ahora existe también en el mapa mundi donde el amor casa con todo y se mezcla hasta con la jeta de cargarlo a cuenta ajena.

Cuando llegué a buscarme la vida , y también por amor, a esta tierra de imputados donde se construyen autovías para llegar hasta la misma puerta de aeropuertos sin aviones,  donde la modalidad de caqui  Cotino gana terreno día a día a naranjas y limones , y sacar al Papa en la tele cuesta hasta veinte veces más, uno de los dichos que más me sorprendió fue aquel "De les coses(pecats)  del piu Nostre Senyor s'en riu" ( ¿hace falta traducción?). Después de ver como los llamados "líos de faldas" arruinaron la carrera política de todo un Edward Kennedy ( años más tarde no lo conseguirían con Clinton), me pareció saludable esa postura de no mezclar afinidades, amoríos, infidelidades, deslices y preferencias sexuales, con la cosa pública, siempre y cuando los gastos del "piu" corriesen exclusivamente, a cargo del beneficiario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario