La radio que más se oye dispara ráfagas de malas noticias, batacazos bursátiles, hecatombes económicas, conflictos sociales, augurios de batacazos electorales y todo tipo de sombrías perspectivas. A las almas conservadoras, además de hipotecadas, se les pone mal cuerpo, y quizá por eso cuando llegan los cortes publicitarios es el momento de pregonar soluciones para seguir en la brecha, para continuar aguantando más tortazos, más desencuentros, más incertidumbre, más acojono ante un futuro que pinta negro, muy negro. La radio de los predicadores más flautistas de Hamelin, la menos furibunda y las más analítica, regresa desconectada a este País del diez por ciento y , entre noticia y noticia sobre Montroi, la guerra de las basuras y El Cabanyal, casi todo lo que anuncia acaba en al, como mal, fatal, penal y mortal, y suena a variaciones de un mismo laboratorio para tiempos de zozobra. Primero es el Revital, para ir aguantando, luego el Recuperal, para encajar golpes y poder tirar adelante, y más tarde el Alertal, con voz de alaska inclúida,para ponerse las pilas , con mucha cafeína, ante tanta contrariedad.
Como esto es un blog nadie va a enfadarse de que aparezcan nombres que están en el mercado de las soluciones químico naturales para afrontar un día como dios manda. Al oyente quizá le surjan dudas de cual de las tres, Revital, Recuperal o Alertal es la más conveniente y apropiada para su caso y sus necesidades, o si acaso se pueden tomar las tres, juntas o separadas, sin que se produzcan efectos secundarios, colaterales e indeseados.
La situación persiste, y todos los días, a la misma hora, con la espuma de afeitar sobre la cara, se repite la misma secuencia promocional de estos tres curiosos productos para cuanto todo, o casi todo, va mal
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